Su perfil distintivo nace de una infusión precisa de 8 botánicos seleccionados: frutos rojos, bayas de enebro frescas de la Patagonia, semillas de coriandro, raíz de angélica, raíz de regaliz, cáscara de limón, cassia y almendra.
El uso de enebros frescos, únicos por su origen patagónico, aporta una frescura inigualable y un carácter singular que diferencia a este gin del resto.
Complejo, expresivo y equilibrado, es ideal para cócteles de autor o para disfrutar en un clásico gin tonic con un twist de frutos rojos.